Como siempre perdura mi estilo, la mala ortografía o redacción, espero les agrade a un con todo sus defectos, al final solo es lo que pienso yo sobre dicho sentimiento, cuídense, ciao:D
Crónica de un amor en decadencia.
Dicen que solo los hombres inteligentes, saben amar… ¡Entonces comprendo porque en este mundo no existe el amor!….
Para mi mala suerte descubre que esta simple emoción, me delata, me descubre…
¡Ahora soy otro ser del montón!…
No, Rogelio no sabe amar…
Recuerdo la lista no tan larga de mis amores y descubro como se deshacen en el hastió, en mi hastió…
Si yo creía en ese sentimiento, pero un día entendí que me equivoque de mundo…
Ellas no lo sentían, ellas no me querían y yo no me podía rebajar, fingir que todo estaba bien, cuando todo era una farsa.
Me canse de su amor a medias, de sus mentiras, de sus deslices…
De mi maldito drama por algo que no sentía, aunque me aferrara a creer que difería de ellas.
De tanto y a la vez de nada…
Solo me aburrí de ellas, de querer comportarme como el único ser inteligente dispuesto a darlo todo por personas que no lo merecían.
El amor de pareja no existe, al menos no en este mundo…
Está en decadencia… Se forma en la ironía, lo irracional, los polos opuestos…
Se mantiene en caprichos, en pasiones, en tontería y se olvida en la realidad, convivencia, orgullo donde se mira sin tapujos aquel ser que no te atrae nada bueno, que dice que cambiara, y sigue otorgándote la misma escoria… ¡Su escoria!
Ser inteligente es aprender a amarse a sí mismo, dejar la basura, los cuentos cursis a hombres involucionados…
Intoxicados con su drama, con su otra mitad llena de espinas que lejos de curarte, te hiere todos los días…
El amor es una mierda asquerosa…
Son los besos mal dados, el sexo sin orgasmo… El aburrimiento en silencios… Sus ademanes y formas insoportables que colapsaron con el tiempo…
Las manías, las mil palabras dichas de esa pareja que no tiene nada que ver contigo…
Los celos absurdos por personas que detestas tanto…
El altar, la idolatría a gente vacía o no vacía…
La belleza exagerada, alabada sin materia gris que se desvanece en la cercanía… O la fealdad que se esconde en fanfarronería.
El análisis constante de esos seres que decidiste amar tanto.
Las obsesiones que mantuviste sin ningún sentido, que te ataban a algo tan diferente a ti mismo.
Para un día entenderlo, comprenderlo….
Ver nuevamente a esos amores en tus pensamientos…
Mirar esos ojos, que ya no te transmiten las mismas emociones….
Y descubrir que amar a cualquier persona es un retroceso, es no crecer, es recoger la piedra que te hundirá en el rió…
Es dejar que las serpientes llenen de veneno tu cuerpo, sin que tú intentes defenderte o curarte…
Es un absurdo, es un martirio…
Es lo que por fin se ha acabado y no volverá…
¿Pensaran que yo soy el malo, otro ser involucionado?…
No lo soy… Ellas solo fueron obstáculos que no me dejaban crecer, que se trababan en mi cerebro…
La vida continúa sin ellas…
Aquí nadie morirá de frió, de nostalgia o babosada… No habrá reemplazos igual de primitivos, la vida crece, seguirá…
En realidad el amor es un invento de la mercadotecnia, un sustento del sistema para ganar dinero…
Otra mentira…
Y esos científicos son sus esclavos… Pues la inteligencia no se haya en saber amar a tu prójimo y entregar tu amor a cada caducada pareja…
El amor está dentro de uno mismo y no se encuentra afuera.
Mientras tanto yo acepto otra etiqueta…
Ser otro del montón, prefiero serlo antes de perecer o expirar mi mente en los amores en decadencia…
En el eterno retroceso de una humanidad fallida, que cuelga su felicidad en delgados hilos, sintiéndose grandes acróbatas de tétricas fantasías.
Fin
Escrito propiedad de Cecy Gutiérrez y Excéntrica Zona
Alterna, todos los derechos reservados.
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